LECHE DE AVENA
La bebida de avena, o leche de avena es una excelente opción para todos aquellos que sois intolerantes a la lactosa o simplemente queréis dejar la leche de vaca. Se trata de una leche muy rica y saludable con un alto contenido en fibra y en beta-glucanos, lo que la hace ideal para reducir el colesterol, además de reforzar el sistema inmunológico y de reducir el azúcar en sangre. Es un cereal muy equilibrado nutricionalmente por su aporte en carbohidratos, grasas y proteínas. También es rico en vitaminas del grupo B, hierro, calcio, sodio, potasio, fósforo, magnesio y omega 6, entre otros.
Yo suelo hacerla en casa una o dos veces por semana, alternándola con leche de almendras o de arroz, que también nos gusta mucho. Me gusta ponerle un poquito de canela y en ocasiones le añado un par de dátiles como endulzante natural, que además de endulzar, os da un aporte extra de vitaminas y minerales.
Se trata de una leche muy versátil, ya que podéis consumirla fría en verano y calentita en invierno. Además, podéis sustituir la leche de vaca por leche de avena en vuestros platos para hacer bechamel o cualquier otro guiso que contenga leche.
Espero que la hagáis en casa, porque además de ser muy fácil y rápida de hacer, está deliciosa!!.
INGREDIENTES:
- 1 L agua mineral.
- 90 gr copos de avena.
- 1 cucharada de panela (azúcar de caña), sirope de ágabe, o cualquier endulzante de vuestra preferencia.
- 1 cdta. canela o esencia de vainilla (opcional).
- Pizca de sal.
PREPARACIÓN:
1. Remojar la avena con un poco de agua durante 15 ó 30 minutos. Posteriormente colar y poner la avena en un recipiente.
2. Cubrir con 1 L de agua mineral y batir con una batidora hasta que la avena quede bien triturada. Endulzar con vuestro endulzante preferido.
3. Colar con una gasa o paño limpio. Guardar en un frasco y meter en la nevera.
NOTA: Esta leche os dura 2 días en la nevera.
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