DARK CHOCOLATE: EL PLACER MÁXIMO
El CHOCOLATE......Qué decir del chocolate!!!! con ese sabor pecaminosamente dulce y que a mí, personalmente, me hace MORIR DE AMOR!!! Negro, con leche, a la taza, con frutos secos......en cualquiera de sus múltiples versiones es alimento de dioses.
El chocolate no es tan fiero como lo pintan, de hecho, tiene muchos más beneficios para nuestra salud que contraindicaciones; eso sí, debe ser negro. Numerosos estudios demuestran que el cacao, especialmente el chocolate negro, es rico en flavonoides y antioxidantes que protegen nuestras células del daño causado por los radicales libres y reducen el riesgo de padecer accidentes cerebrovasculares. Yo no sé a vosotros, pero a mí el chocolate me hace feliz. Ésto no es casualidad, puesto que es debido a que el chocolate negro es capaz de mejorar el estado de ánimo, estimulando la actividad neuronal en las regiones del cerebro relacionadas con el placer.
Hoy en día podemos encontrar en el mercado infinidad de variedades de chocolate, repletos de grasas saturadas perjudiciales para nuestra salud, como el tan de moda aceite de palma y de azúcares refinados. Pero que no cunda el pánico, porque lo que hoy os propongo es un chocolate negro saludable, sin ingredientes de origen animal, sin lactosa, sin gluten y rico hasta decir basta. Las grasas que contiene son de origen vegetal, como el aceite de coco y la manteca de cacao. Estos dos aceites aún no suelen comercializarse en supermercados, pero podéis encontrarlos fácilmente en cualquier herbolario de barrio.
El aceite de coco es uno de los pocos alimentos que puede considerarse “superalimento” y entre sus beneficios está el de favorecer la pérdida de peso, ya que es capaz de acelerar el metabolismo, haciendo que perdamos más grasa. Además, es un potente antibacteriano, ayudándonos a convatir infecciones. Por otro lado, la manteca de cacao contiene ácido oleico, grasa monoinsaturada que se encuentra también en el aceite de oliva, y que tiene el poder de reducir el colesterol. Ésto no significa que tengáis que comer chocolate a todas horas, pero un trocito de vez en cuando es un pequeño placer que debemos permitirnos.
Y sin más preámbulos, paso a explicaros paso a paso cómo hacer esta delicia....
INGREDIENTES:
- 70 gr de cacao puro sin edulcorar.
- 40 gr de aceite de coco virgen (de primera presión).
- 50 gr de manteca de cacao.
- 1 + 1/2 cucharadas de sirope de ágave, miel, panela, o vuestro endulzante preferido.
- Pizca de sal.
- Arándanos deshidratados.
- Avellanas (o cualquier fruto seco).
PREPARACIÓN:
1. Coloca el aceite de coco y la manteca de cacao al baño maría hasta que estén bien derretidos.
2. Posteriormente incorpora el cacao, el sirope de ágave, la pizca de sal y bate con una batidora hasta que estén bien mezclados todos los ingredientes.
3. Extiende la mezcla sobre un papel vegetal que previamente habrás puesto sobre una bandeja y posteriormente añade las avellanas troceadas y los arándanos deshidratados por encima. Puedes poner los frutos secos de tu preferencia o añadir un poco de leche vegetal si no te gusta el chocolate muy negro.
4. Mete el chocolate en la nevera un mínimo de 2 horas para que los aceites se solidifiquen y se pueda partir fácilmente. Ahora ya puedes dirfrutar de esta dulce tentación.
NOTA: Conservar el chocolate en la nevera, principalmente en verano, ya que el aceite de coco con temperaturas superiores a 20ºC empieza a derretirse.
